ALMAGRO: De menor a mayor. Primer cuarto de hora para olvidar. No logró hacer pie y el rival lo tuvo a maltraer. Promediando la etapa empezó a mejorar de la mano de Juan Manuel Martínez (a quien le anularon un gol por posición adelantada). En la segunda parte terminó por hacer efectivas las insinuaciones. Con interesantes pasajes empezó a cercar dominios de Agüero. No extraño que la figura de la tarde fuera el dueño del primer grito. Poco duro la alegría, ya que en un rapto pasó a quedarse con diez (expulsión del arquero y el DT decidió sacar al más peligroso). El traspié siguiente fue padecer dos goles repentinos que lo dejaron en desventaja. Pese a todo, con algo de fútbol y mucho temple no se rindió, y en tiempo adicionado consiguió la justa igualdad, que a juzgar por las circunstancias, lo dejó al menos con media sonrisa.

GUILLERMO BROWN: Sorprendió a propios y extraños manejando los hilos del inicio. Si bien no pudo rubricarlo en ventaja, fue interesante el trabajo colectivo y la movilidad de los atacantes. Sacó el pie del acelerador cuando creció el rival y sostuvo el cero con cautela. En el ST mostró dos caras: inferior al Tricolor hasta la expulsión del arquero local y se vistió de oportunista sabiendo dar vuelta el marcador en apenas cinco minutos. Con todo a favor, no supo rematarlo y terminó padeciéndolo cuando la tarde se apagaba. Pese a no quedar en deuda por lo expuesto, dejó pasar la posibilidad de conseguir su primera victoria.