LA CLAVE: San Miguel salió a jugarlo a todo o nada, como una final. Por eso se quedó con el triunfo.

SAN MIGUEL: El fútbol lo ponía Leguizamón en sociedad con Fiscella. Atrás, Agorreca y Méndez anulaban todo lo que se les venía. Adelante Scarnato peleaba todas, aguantaba cuando debía hacerlo, y Martín era el ladero perfecto. En los primeros minutos, tanto a Leguizamón como a Martín les jugó una mala pasada la cancha cuando podrían haber definido mejor. A los 38 minutos, Fiscella metió un tiro libre al segundo palo, por donde entró Méndez para sacar un misil con su cabeza y poner el 1 a 0. Dos minutos después, Martín habilitó a Leguizamón que se lo perdió por poco. En el segundo tiempo no negoció su actitud y siguió mandando en el partido. A los 7 minutos, Martín metió un bombazo y Tursi volvió a salvar. A los 16 minutos, Scarnato hizo lucir al arquero visitante. Al final, pasó algún sobresalto pero se llevó la victoria sin ninguna objeción.

DEPORTIVO MERLO: Poco para destacar. En el primer tiempo, Ojeda intentó algo distinto desde el juego y su garra, pero careció de compañía. Maraschi intentaba preocupar por la izquierda del ataque, y no mucho más. A los 32 minutos tuvo la más clara con una mediavuelta del propio Maraschi que se fue cerca. Con el 0-1 no mostró nada de rebeldía para torcer el destino. En el segundo tiempo siguió con esa tibieza exasperante que cambió algo con el ingreso de Romero y, más que nada, de Rusculleda. A los 37 minutos, precisamente el ingresado Rusculleda mostró su calidad con un remate cruzado que López mandó al corner con las uñas. Quizás si Cólzera hubiera ingresado antes, podría haberse asociado a Rusculleda y Romero y la historia haber tenido otro final. No arranca el Charro en este Clausura.