LA CLAVE: El fútbol de Pombo y la velocidad de Varela. Ahí estuvo la diferencia.

LUJÁN: Arrancó siendo impreciso y dividiendo la pelota con el rival. Con el 0-1 no tuvo reacción en ese primer tiempo. En el segundo, no varió mucho el panorama. Salvo algunos intentos individuales de Gonzalo Pérez, nadie se hizo cargo de ayudarlo a encontrar las llaves que pudieran torcer el destino a derrota. Sin embargo, tras una jugada preparada a la salida de un corner llegó el cabezazo de Villarreal para poner el empate en su único tiro al arco de todo el partido. Luego, llegaría el penal para el rival y la victoria del equipo del Sur. Floja actuación del equipo de Ruggero.

BERAZATEGUI: Tras un comienzo donde compartía imprecisiones con el local, apareció Pombo para marcar el camino por donde hacerle daño a su rival. Se recostó sobre la derecha del ataque y desde allí habilitaba pases a espaldas de Cañete para que Varela lastimara. Avisó dos veces y, en la tercera. Varela encontró la cabeza de Gómez por el segundo palo para enviarla al gol. Tenía la pelota y seguía insistiendo por más, aunque con escasa fortuna cuando se acercaba al área grande. Llegó el inexplicable 1 a 1 y reaccionó. Dos minutos después, Zárate metió un cabezazo en el travesaño y, a los 40 minutos, Varela desbordó y vino el penal. Pombo puso el 2 a 1, y ganó el que más méritos hizo.