LA CLAVE: El segundo gol tucumano. Cuando estaba más cerca el local, Cuevas desniveló para la visita.

CHACARITA JUNIORS: Fue sorprendido de entrada. Se le hacía cuesta arriba crear peligro cuando estaba programado para otra cosa. Una ayudita de Arce, en su intento de darle un pase a Ballini, fue a parar a los pies de Perdomo que definió con un remate de 35 metros de emboquillada, ante el desesperado regreso del arquero que estaba diez metros adelantado al área grande. Empezó a creer que podía, y se apoderó del mediocampo. Con pelotazos frontales para Bonansea, este se encargaba de complicar a los centrales, pero le faltó más hambre ofensiva a Groba para darle una mano. Vega iba bien por afuera, y del otro lado Insúa y Chávez se turnaban para lastimar. A los 36´ llegó un remate cruzado de Bonansea, que Insúa corrigió por el segundo palo y Arce evitó la caída. Sobre el final y tras un córner, Bonansea anticipó por el primer palo y, cuando le quedaba a Ríos para definir, apareció el cierre justo de Estigarribia. En el ST, siguió mandando en el medio. Donde había un rival, había dos propios para marcar. Le quitaba espacios a su rival. Entró Lezcano para dar una mano por derecha y el rival se volcó por ese sector. Cuando parecía que lo podía ganar (Mazur avisó con un cabezazo a los 22´ que sacó Arce), llegó el 1-2. Jugado por jugado, los cambios hicieron que se descompensara y el 1-3 fue demasiado. Tanto, que Aldirico presentó su renuncia una vez finalizado el partido.

SAN MARTIN (Tucumán): Arrancó ganando casi desde el vestuario, tras un gran centro de Imbert que se escapó por la punta que marcaba Insúa, la pelota cruzó el área y llegó Diarte para darle un bombazo. Increíblemente se quedó cuando se esperaba que tratara de liquidar el partido, y por una mala salida de Arce, llegó el empate de Chacarita. Tuvo una gran chance a los 31´  con un pelotazo de Ballini para Estigarribia que remató desviado. En el segundo tiempo Pablo De Muner intentó modificar un poco el panorama, y por ello fue que ingresaron tanto Daniel González como Emanuel Cuevas, pero faltaba precisión del medio hacia adelante, no podían con la presión de los volantes del local. El vuelco fundamental se dio con la salida de Groba en el local. San Martín acentuó sus ataques por izquierda y llegó al gol, con una pared entre Cuevas - Cháves - Cuevas y zapatazo cruzado para el 2 a 1. Con el rival jugado en ofensiva, Daniel González desbordó por derecha y metió el centro para Cuevas para definir el partido, quizás de manera exagerada, cortando la mala racha en campo Funebrero donde nunca había ganado, y afianzándose como protagonista del torneo.