LA CLAVE: Lo concentrado que estuvo Amud en capturar el rebote del arquero, para así poner el 1 a 0.

ARGENTINO (Rosario): Siempre dio la sensación que quería ganarlo. Quizás no contó con el fútbol de Flores y las apariciones de Heiz, pero desde el empuje de Sánchez y las pinceladas de Otero, quedó la sensación que en esa etapa fue superior. La más clara fue de Otero, que tras un despeje de Balderrama remató y la pelota le dio en la espalda al arquero cuando tenía destino de red a los 42´. En el segundo tiempo, en la primera seria que tuvo, facturó después de un corner que cabeceó Miguel Báez en el primer palo, manoteó Balderrama y Amud empujó, entrando por el segundo palo. De ahí hasta el final fue todo aguante, hacer tiempo las veces que fuera necesario, pelear todas las pelotas como si fueran la última y hasta lo pudo haber liquidado con alguna contra que desperdició el hábil Sosa. Justa victoria del Salaíto que va confiado a la revancha en Morón.

SPORTIVO BARRACAS: Desde la formación que presentó al comienzo era una apología a aquel tema de Charly García "Este es el aguante". Sin un generador de juego neto, trató de abrir la cancha con Fleitas y Juárez, aunque no con mucho éxito. Igualmente, generó dos chances: a los 7 minutos un gran centro de Fleitas no pudo ser conectado por Martínez que llegó un segundo tarde a la pelota y, a los 40 minutos, Carlos Báez recibió en el área y su remate fue desviado por el arquero. En el segundo tiempo, y recién después del 0-1, ingresó Negro Villarreal para darle algo de fútbol pero no pudo revertir la tendencia de una tarde muy gris. Tampoco el resto de las variantes le dio el lavado de cara necesario para llegar a la igualdad, y recién tuvo una chance a los 43 minutos cuando Maciel se la cedió a Fleitas y este remató apenas arriba del travesaño desde larga distancia. Igual, está vivo para seguir en el Reducido.