LA CLAVE: Los penales. En los 90´, paridad absoluta. El Guapo no falló y por eso consiguió el ascenso a la máxima categoría.

BARRACAS CENTRAL: De entrada, tuvo una actitud agresiva, muy diferente a la que se le había visto en la final con Tigre. Así, con más empuje que juego, fue generando situaciones sobre el arco de Saracho. Aprovechó bien los laterales y pudo abrir el marcador con ese cabezazo de Paz que entre Saracho y el travesaño se encargaron de evitar que fuera a parar al fondo del arco. Se plantó de igual a igual, por momentos metiendo y por momentos intentado jugar, en un partido que de juego tuvo poco. Algún lujo de Vázquez que no prosperó y las ganas de Colitto, pero poco más. En el segundo tiempo, al igual que Quilmes, pareció apostar a los penales. El ingreso de Valenzuela le dio algo de frescura pero no pasó de eso. Prácticamente no llegó al arco de Saracho y lo más destacado fue su dupla central, atenta siempre para ganarle el duelo a los atacantes quilmeños. Así llegó a los penales, en los que tuvo una performance impecable para alzarse con el mayor logro de su historia: llegar a Primera. 

Barracas finalmente coronó su ascenso, el cual quedará más marcado por los polémicos arbitrajes y por las sospechas de los partidos con Dálmine y Almirante Brown, que por sus méritos deportivos.

QUILMES: Llegó sin sobrarle nada, y si bien tuvo situaciones como para romper el cero, nunca pudo imponerse en el partido. Durante el primer tiempo buscó casi siempre por izquierda, quizás el sector más vulnerable de la defensa de Barracas. Pero sus situaciones más claras vinieron vía pelota parada, primero con un rebote de Gagliardo que Rafael Barrios, completamente solo, no pudo empujar al gol, y luego con un cabezazo de Pavone que pegó en el palo. Quilmes jugaba el partido como lo que era, una final, metiendo en cada pelota, pero sin brillo futbolístico. En el complemento hizo muy poco para ganar. Nunca pudo encontrar solo a Pavone y por momentos abusó de los centros. Los cambios no le aportaron demasiado, y sin mayor rebeldía, se encaminó a los penales. Allí se quedó con las manos vacías, pagando el excesivo conformismo mostrado en los segundos 45´.

BARRACAS CENTRAL 0 (5): Gagliardo (6); Bordón (6), Bruno Cabrera (6)(92´ Estigarribia), Fernando González (6)A y Paz (5); Carlos Arce (6); Colitto (7), Iván Tapia (4), Glaby (6) y Juan Manuel Vázquez (5)(69´ Buter); Albertengo (5)(65´ Valenzuela). DT: De Paoli. Suplentes: Monllor, Imperiale, Acuña, Daniel Martínez, La Mastra y Stable 

QUILMES 0 (4): Saracho (6); Rafael Barrios (5), Pier Barrios (6), García Basso (6) y Bindella (5); Bonetto (5)(78´ Ortega), Calello (6)(88´ Moreno), Facundo Silva (5)(66´ Bottari) y Machado (6)A; Pavone (6)(77´ Tomás Blanco) y Pons (5)(66´ Federico Anselmo). DT: Sava. Suplentes: Budiño, Arias, Villarruel y Barbieri

Cancha: Racing Club (muy buena)

Árbitro: Darío Herrera (7) Bien anulado el gol a Quilmes de parte del asistente. Correcto en las decisiones. Para la polémica, el penal no cobrado a Albertengo, donde se advierte un contacto que no llega a ser falta.

Público: 30.000

Resultado moral: Barracas Central 1 - Quilmes 1

Definición por penales: Convirtieron Iván Tapia, Colitto, Estigarribia, Paz y Valenzuela (BC); Federico Anselmo, Ortega, García Basso y Moreno (Q); Rafael Barrios desvió su remate