VELEZ SARSFIELD: En el primer tiempo se adueñó del balón pero le faltó sorpresa y aceleración, a excepción de cuando Luca Orellano encaraba y provocaba cierto desequilibrio. De todas maneras el "Fortín" era el que proponía, aunque no encontraba los caminos ante un rival que se presentó duro en la etapa inicial. Sin embargo, la apertura arribó a los 37 minutos luego de un desborde de Francisco Ortega por izquierda, el toque de Orellano -quien intervino en los primeros 4 tantos-, y la aparición de Franco Díaz para empujar el balón en el segundo palo. En el complemento, todo fue de Vélez, que ganó, goleó y gustó pasando por encima al "Albinegro" con una soberbia actuación de Luca Orellano, bien acompañado por los juveniles Franco Díaz y Mateo Pellegrino (el hijo del DT fue titular debido a que pocos minutos antes del inicio, Sebastián Sosa Sánchez se lesionó), más el aporte de los pibes ingresados en una estructura de equipo sólida y sin fisuras. El segundo tanto se produjo a los 4 minutos, con un gran pase de Orellano para la definición de Pellegrino con disparo rasante. Tras varias oportunidades desperdiciadas, un pelotazo largo y preciso de Orellano dejó solo ante el arquero al ingresado Julián Fernández, que no perdonó. Y poco después Orellano marcó el cuarto en lúcida maniobra: ensayó una gambeta y bonito zurdazo a colocar junto a un palo. Cerca del cierre, Bouzat envió un centro para la entrada de Santiago Castro que concretó el 5 a 0 con un derechazo. De esta manera, con un segundo tiempo perfecto y de alto nivel, el Fortinero volvió a ganar y a convertir luego de 3 cotejos y en la próxima ronda de la Copa Argentina se enfrentará a Independiente Rivadavia.

CIPOLLETTI: En la primera parte realizó un papel digno, ya que si bien cedió el balón y la iniciativa, su rival le creó solo un puñadito de llegadas pues el "Capataz" se mostró atento a las marcas, combativo y concentrado, aunque inofensivo en ataque. En la segunda parte, se quedó sin resto físico, ya no pudo aguantar el vendaval de Vélez y culminó vapuleado. Y arriba otra vez casi no preocupó y se mostró anémico e impotente. Como excusa valedera vale destacar que, para los rionegrinos, se trató del primer compromiso oficial de la temporada pues el torneo Federal, en el que participan, aún no arrancó.