La Fragata no encuentra el rumbo
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La Fragata no encuentra el rumbo

Almirante volvía al triunfo, pero sobre la hora Villa Dálmine se lo igualó. Fue 2-2 y, de este modo, el Mirasol suma ocho partidos sin ganar. ¿Qué pasará con el futuro de Fabián Nardozza? (Foto: Almirante Brown oficial)

Por Sergio Grünblatt

LA CLAVE: En todo momento pareció que el empate de Dálmine estaba al caer. Más allá de la ventaja, Almirante no hizo mucho para quedarse con los tres puntos y el resultado final fue lo más justo.

QUÉ HICIERON
ALMIRANTE BROWN: No queda nada del equipo que supo ser del torneo pasado. Carece de solidez en el fondo, el mediocampo aparece en cuentagotas y en ataque cuenta con un bajo nivel de Chávez, muy lejos de ese delantero que asomaba en las primeras fechas. Aceptables primeros 15 minutos, aunque luego se desdibujó, perdió el medio y era atacado por frecuencia por el sector de Flores. Llegó el gol rival y el desconcierto fue total. Sobre el cierre del primer tiempo, con más empuje que otra cosa dio vuelta el partido: un testazo de Barrionuevo y el penal convertido por el “Guri” García. Lo que suponía una inyección anímica para el segundo tiempo no fue tal. Solo tuvo un cabezazo de Monzón por arriba, cuando el complemento arrancaba. Luego, a merced de lo que podían hacer los de Campana. Las variantes modificaban una y otra vez el esquema: Guzmán quien ingresó de volante por derecha, finalizó como lateral. Un Luján y Gómez sin peso, por lo que todo se tornaba muy cuesta arriba. Ni siquiera el saber que la visita desperdició un penal lo ayudó. El rival perdonó una y otra vez, hasta que, en el cierre cayó el empate. Careció de reacción para poder ir en búsqueda del tercero. Ahora, con fecha libre por delante, son más las dudas que certezas. Todas ellas, en relación a la continuidad de Nardozza.

VILLA DÁLMINE: Sobre el cierre tuvo su premio por no claudicar en momento alguno. En la previa el 5-3-2, daba la impresión de ser netamente defensivo y para tratar de aguantar el cero. Pasó la presión de los primeros 15 minutos y, de a poco, comenzó a soltarse con las subidas de Tello, la claridad de D’Angelo y las apariciones por sorpresa de Alberione. Sus internos se combinaron en una linda jugada y Tello marcaba el uno a cero. Mantuvo con tranquilidad el resultado, pero sin merecerlo se fue al descanso en desventaja por una ráfaga del Mirasol. Entendió lo que pedía el partido y en base a centros y pelotazos complicó a una defensa que no se mostró segura. Primero lo perdió Camisassa y después, Haberkorn no podía desde los doce pasos. El propio delantero iba a tener una nueva posibilidad después de una pifia de Dattola, pero definía por arriba del travesaño. No se desesperó y fue paciente. A pesar del resultado tuvo la lucidez de mantener la calma y estar a la expectativa, sabiendo que el rival no inquietaba. Esto le iba a traer sus dividendos, cuando D’Angelo se paró sobre la derecha y mandó un centro con rosca, que nadie llegó a tocar y complicó a Martínez, para decretar el empate. Continúa en los últimos puestos, pero dio una muestra de carácter importante 

EL PANTALLAZO
La fresca noche y el presente de Almirante no invitaron para que la gente acompañe como lo supo hacer al comienzo del torneo. Entre los sectores que se habilitaron, aproximadamente 9000 personas en el Fragata. En cada cabecera se lucieron tanto los trapos como banderas atravesadas que identifican a cada sector de la hinchada. Desde el inicio sonó desde la cabecera Norte “cueste lo que cueste/ esta noche tenemos que ganar”. Para dar paso a otras canciones como “una gitana hermosa tiro las cartas/ me dijo que Almirante va a ser campeón/ ya lo corrimos al Gallo y no pasó nada” o “che, Gallito, prepárate/ que ya se viene el combate/ ya lo viste al Almirante/ aguantando en todas partes”. Después del gol visitante se oyó “movete Almirante, movete/ movete deja de joder”. Se recuperó la calma y el aliento para el segundo tiempo, pero eso decayó sobre el cierre cuando empataron los de Campana. Allí, la tribuna de la calle Mármol explotó con “jugadores, la c…de su madre/ a ver si ponen huevos/ que no juegan con nadie”. Hit que fue replicado por el sector que se ubicó más próximo a la Ruta 3 y, desde este lado, también cantaron “la camiseta de Brown se tiene que transpirar/ sino no se la pongan/ vayanse, no roben más”. Despedida con silbatina. De Dálmine, 20 allegados.

ALMIRANTE BROWN 2: Ramiro Martínez (5); Leonardo Flores (4)(68’ Victor Gómez), Agustín Dattola (4), Alan Barrionuevo (5)A y Ramiro Fernández (6)(74’ Ian Rasso); Patricio Núñez (5)(63’ Leandro Guzmán), Marcos Britez Ojeda (6), José Luis García (5)A y Diego García (6); Cristian Chávez (4)(63’ Nicolás Luján) y Florian Monzón (5). DT: Fabián Nardozza. Suplentes: Manuel Peralta Salinas, Marcelo Vega y Gastón Scisci 

VILLA DÁLMINE 2: Alan Sosa (5)A; Agustín Alberione (6)(83’ Gino Olguin), Facundo Gómez (5)A, Braian Camisassa (4)A, Fernando Moreyra (5) y Diego Martínez (5)A(70’ Francisco Nouet); Laureano Tello (6), Emiliano Agüero (5)(77’ Juan Cruz Franzoni) y Ezequiel D’Angelo (7); Lautaro Díaz (5)(83’ Nicolás González) y Federico Haberkorn (4). DT: Carlos Pereyra. Suplentes: Francisco Salerno, Valentín Albano y Franco Costantino.

Jugado el 16 de mayo
Goles: 31’ Laureano Tello; 45’ Alan Barrionuevo; 45’ (+5’) Diego García (de penal); 89’ Ezequiel D’Angelo.
Cancha: Almirante Brown (buena)
Árbitro: Nahuel Viñas (6)
Público: 9000
Resultado moral: Almirante Brown 2 – Villa Dálmine 2