LA CLAVE: La efectividad de los dos en la primera parte: Dock Sud con cabezazos y Cañuelas abriendo juego por izquierda. Eso configuró un empate con muchos goles en un partido con matices.

DOCK SUD: Si bien golpeó en pleno momento de estudio por medio de su primera llegada a fondo (centro de Avalos, frentazo de Aguila), no pudo aprovechar esa aceleración de arranque y fue quedándose dentro de un partido que se volvía cortado por lesiones y faltas menores. El esquema de un De Lucca que sigue buscando el equipo ideal, y que esta vez pobló el medio con los Alvarez como estandarte, paradójicamente se vio recién en el segundo tiempo ya con el partido 2 a 2. Allí pudo haberlo ganado pero Lingua Bender le tapó un disparo a Cariaga. Como sea, sigue en deuda con aspectos futbolísticos y no poder repetir el equipo base le ha jugado una mala pasada. Va a terminar el Apertura lejos de los puestos del descenso, pero no con el aire que desearía tener.

CAÑUELAS: Desde lo que tiene que ver con la estadística, por tercer par de partidos consigue la media inglesa. Esto lo sacó de cualquier temor a pelear el descenso y ya se sentó de lleno a la mesa de los diez que, si Comu no repite, irán por un ascenso. En lo que a su paso por el Docke respecta, fue superior en la primera etapa, cuando agarró la pelota, aún con intermitencias, pero se mostró dispuesto a ir siempre con las subidas de Julián Cano y de Suárez Costa. Por trepadas por izquierda vinieron las jugadas con definición (bien de goleador) de Kruger abajo del arco. Penó en su área porque le marcaron dos veces de cabeza. Y en el segundo tiempo no pudo repetir las cosas buenas del primero porque le taparon esos circuitos por afuera. Terminó con diez por el momento de bronca de Lillo (exceso verbal), pero no se quiso refugiar en el desenlace. Es un punto que recién cuando se haya terminado la tabla general podrá o no valorarse. Por ahora, el Tambero configura un buen Apertura.