Primera Nacional Alvarado (Mar del Plata) Güemes (Santiago del Estero)
Alvarado, con juego y actitud
En Mar del Plata, el Torito le ganó 2-1 a Güemes (Santiago del Estero) mostrando cosas interesantes de cara al futuro. (Foto: Noticias Mar del Plata)
Por Miguel Ángel Álvarez - Diario La Capital
Así da gusto ver a Alvarado. Con sentido colectivo, voluntad para recuperar la pelota y rendimientos individuales altos. El equipo marplatense concretó su mejor actuación de la temporada, superó a Güemes por una diferencia mayor a la que indicó el resultado (2-1) y tiene un espejo en el que mirarse para apuntar un poco más arriba en la Primera Nacional de fútbol.
Alvarado fue otro desde el principio. A partir de la actitud y por su juego. Antes del tempranero gol, que fue un impulso para la confianza, salió dispuesto a minimizar al rival. Con defensores atentos para anticipar, mediocampistas que contagiaron con su entrega, rotaciones continuas para generar opciones de pase, agilidad y profundidad por los extremos y mayor personal en zona de definición. Una cosa llevó a la otra y constituyó un sólido conjunto.
Los nombres propios, claro, también hicieron a la cuestión. La presencia de Mattia sumó a la siempre imponente de Ledesma. Mieres pasó al ataque para hacer daño y aportó nuevamente un centro determinante: un equipo al que le cuesta encontrar vías de gol no debería prescindir de sus virtudes.
Malagueño y Lamardo cumplieron una tarea encomiable, con mucho desgaste para el quite, pero también para buscar espacios disponibles en el área rival. Vitale recuperó su esencia, con claridad en la gestación y dos pases notables para dejar mano a mano a Matías Rodríguez y Malagueño.
Leandro Vella desniveló en el uno contra uno cuando el partido estaba más cerrado. Otra cosa que Alvarado necesitaba como el agua. A veces pecó de egoísta, pero su desequilibrio fue vital en el primer gol.
Jorge Ramos estuvo participativo, no sólo para pivotear, como lo hizo en una situación que desperdició Vella, sino también para aparecer en zona de definición, donde no estuvo fino.
Güemes inquietó muy poco. Una vez que Assennato le ganó la espalda a Irazoque y en los momentos que Alvarado bajó el ritmo, muy difícil de sostener los 90 minutos. Pero casi no generó situaciones claras. Ruiz Díaz, sin grandes atajadas, mostró seguridad.
El primer gol, a los 6′, fue una perfecta jugada colectiva que reunió varias de las bondades mencionadas. Vella pasó un rival, enganchó ante otros dos, tocó atrás para Mieres, cuyo centro preciso fue conectado en posición de “9” por Lamardo.
El segundo, a los 10′ del complemento, fue de contraataque. Exquisita habilitación de Vitale, con ojos en la nuca y un guante en el pie, para la corrida de Matías Rodríguez, quien le ganó en velocidad a Gabriel Fernández -el ex Alvarado-, no pudo con el arquero en primera instancia, pero tocó a la red sin oposición tras el rebote.
El descuento de Güemes, a los 36′, fue de pelota parada. Arma que tanto sufrió Alvarado durante el torneo. Pero esta vez mostró muchas otras para contrarrestar.
El equipo de Manuel Fernández cumplió con creces ante los santiagueños. Ahora debe buscar regularidad y tratar de imponerse ante rivales de mayor talla.
ALVARADO 2: Ruiz Díaz (A); Mieres, Mattia, Franco Ledesma e Irazoque; Malagueño, Vitale y Lamardo (87´ Sequeira); Vella (68´ Santiago González), Jorge Ramos (68´ Pons) y Solís (50´ Matías Rodríguez). DT: Manuel Fernández. Suplentes: Zapata, Menéndez y Ramis
GÜEMES (Santiago del Estero) 1: Papaleo; Zanini (A), Gabriel Fernández, Serrano y Lazarte (80´ Aleo); Assennato (63´ Jara), Nicolás Juárez, Marcos Fernández (45´ Comas) y Banega; Melivilo y Salto (80´ Enzo López). DT: Perazzo. Suplentes: Mendonca, Olivarez y Paredes
Jugado el 12 de junio
Goles: 6´ Lamardo, 55´ Matías Rodríguez y 81´ Enzo López
Cancha: José María Minella -local Alvarado-
Árbitro: Mario Ejarque