LA CLAVE: Pombo y Niell marcaron la diferencia, y luego el oficio colectivo para mantener el resultado.

LINIERS: Realizó un gran primer tiempo donde se destacó mucho el trabajo de Federico Chacón, para ser el nexo ideal con los delanteros Occhiato y Méndez. Sacó la diferencia y hasta pudo haber conseguido algún gol más. Tenía a la defensa bien escalonada y proponía más juego que lucha, algo que en esta categoría no se ve muy seguido. El inicio del complemento fue muy malo, en cambio. Le empataron, en un abrir y cerrar de ojos se lo dieron vuelta y seis minutos más tarde llegó el golpe definitivo. La derrota casi que lo despidió del Reducido, pero le queda la tranquilidad de no haber desentonado en la vuelta a la categoría, tener una base interesante y seguir creciendo institucionalmente.

BERAZATEGUI: Llegó con la obligación y necesidad de la victoria, por los puestos de la tabla general. Tras un mal primer tiempo Troncoso metió mano en el descanso con dos cambios juntos y eso fue clave, porque sirvieron los ingresos de Niell y Zárate para acompañar a Flores, que fue lo más parejo del equipo en el tiempo que estuvo en cancha. Más la jerarquía de Pombo y ese olfato goleador que siempre lo caracterizó a Franco Niell, con todo eso dio vuelta la historia en un cuarto de hora, siempre con el oficio que caracteriza a este equipo que parece ir revirtiendo un momento complicado de su campaña.