LA CLAVE: Las circunstancias negativas obraron de combustible para Talleres. Con un hombre menos, los de Escalada fueron más.

TALLERES: En lo negativo, la primera porción del primer tiempo donde no podía con la presión rival y seguía evidenciando su falta de peso ofensivo, ya que pelea arriba pero es uno de los menos goleadores del torneo. Con el 0-1 se comenzó a animar, con jugadas preparadas, otras rápidas en movimiento y el destaque de los volantes como fuente ofensiva. En el segundo tiempo pasó a hacer las cosas mejor, lo tuvo con un zapatazo de Arcuri que Pucheta salvó en casi tres tiempos, y llegó al empate en una aparición por sorpresa de Enrique. Como la visita, tarde, se acordó de buscarlo, el equipo de De Cicco tuvo que bajar un poco los decibeles. Pero no merecía irse con las manos vacías, por más que le siga costando ganar como local.

SAN MIGUEL: Veinte minutos dignos de un equipo puntero, porque realmente era más y justificó la apertura que llegó vía esa perla de tiro libre de Muller, y un resto de partido donde se quedó hasta peligrosamente, dando lugar al acercamiento de los de Escalada. Esta postura, que a poco estuvo de pagarla con ceder puntos ante Argentino de Merlo, le costó la igualdad. Después del empate Coleoni se la jugó a buscarlo con la entrada de Scarnato, a quien reemplazó desde el inicio para buscar otra fuente de ataque colectivo, y esa presencia inquietante de Lucas como faro le permitió volver a acercarse a Tello, mas no recuperar los dos puntos que se le estaban escapando.