LA CLAVE: La intensidad del partido dependió de la excesiva fuerza con la que se lo tomaron. Cuando controlaron esa ansiedad (porque iban camino a un tendal de expulsados) también aflojó el juego.

BROWN (Adrogué): Para los de Adrogué fue un buen arranque porque aprovecharon la primera que tuvieron, con ese preciso centro de Perinciolo que Heredia, entrando por atrás, mandó a guardar de zurda. Trataban de controlar el medio, zona que irían perdiendo con el correr del partido, pero el autor del gol fue fuerte a una pelota dividida y se fue correctamente expulsado en medio de un partido que subía de voltaje. Ya diez contra diez y con el segundo tiempo por delante, Vicó retocó la defensa y parecía que se volcaría a aguantarlo, pero el rápido empate de Dematei dejó todo en igualdad de condiciones, en goles, hombres y hasta en merecimientos. Con la entrada de Lavezzi y de Pacchini intentó inclinar la cancha pero le quedaba poco tiempo. Sabor a poco porque fue ganando, balance positivo en cambio si uno ve que de 17 partidos apenas perdió uno.

DEPORTIVO RIESTRA: Avisó dos veces en diez minutos con la pelota parada, pero como no la defendió bien en contra quedó perdiendo cuando no había pasado nada. Pasó a costarle el partido pero así y todo tuvo una clarísima con un derechazo de Céliz en el palo. Volcado a querer empatarlo, quedó mal parado en una contra, no le quedó más remedio a Ramírez que tomar a Vidal y el Malevo quedaba con diez, al igual que Brown. Para el segundo tiempo, Marchesi metió a Acuña, lo cual revelaba sus intenciones de buscarlo con juego. Y el empate llegó con una buena maniobra y el intérprete menos pensado: Es que fue Dematei el que tiró la pared con Gustavo Fernández (generoso todo el partido saliendo del área a pivotear y aguantar), y entonces el mencionado "Vikingo" definió como si toda la vida hubiese sido un volante ofensivo. Tras la igualdad le costó llegar y no pudo generar ese palo y palo que a veces le gusta. Tovo en el fondo fue una columna para no pasar más sustos y se llevó un empate más, como tantos otros que ha venido sumando pero eso sí, en silencio ya lleva ocho sin perder y todavía la meta de jugar el Reducido y Copa Argentina está a tiro.

HOMENAJE DESTACADO: Se cumplieron diez años del primer ascenso de Brown al Nacional y la dirigencia otorgó plaquetas a los distintos partícipes del logro, que dieron una vuelta olímpica en el entretiempo acompañados por sus familias.