LA CLAVE: No se salió del libreto ninguno de los dos equipos, a lo largo de todo el partido.

DEPORTIVO ARMENIO: Salió a realizar el gasto, pero si no hay cambio de ritmo, ningún volante puede romper por afuera ni los laterales proyectarse, va haciendo caer el partido en un pozo ciego donde depende de algún yerro del rival para abrir el marcador, y como esto no ocurrió terminó en centros y pelotazos frontales fáciles de controlar para el arquero rival, y no pudieron hacer entrar en juego ni a Barbieri ni a Scarnato, quien estuvo offside en la mayor parte del partido. Así desaprovechó una fecha que hubiera sido más que propicia para recortar distancias.

FENIX: Llegó a Maschwitz con la ausencia de Gustavo Cisneros internado, y sin el cerebro del equipo Nicolás Bertolo. El ayudante Damián López utilizó una línea de tres o de cinco según tuviera o no la pelota, contando con una suerte de pacman como Guillermo Mackay quien fue la figura del partido. La pelota le llegó en cuentagotas a Verdún y Ottaviani, pero atrás planteó un buen embudo para irse con un punto que le permite seguir peleando en la tabla general.

EL PANTALLAZO:

Como siempre, las banderas colocadas desde temprano y unos 114 hinchas que luego ocuparon la popular local, sumadas a 96 personas en la platea. Del otro lado de la reja 28 allegados pertenecientes a Fénix.