LA CLAVE: En un partido bastante chato, a Almagro le alcanzó con un buen cuarto de hora después de su gol para explicar por qué era superior a su rival. 

ALMAGRO: Trató de llevar las riendas del partido en campo rival, pero fue recién en su primera llegada de peligro donde, vía Franco Vedoya, hizo la diferencia. Después lo sostuvo con orden y algunas cosas puntuales, como la firmeza del eje derecho de la defensa y el coraje de Joel Orlando para bancarse la lucha. Le faltó ser más picante para tener la chance de aumentar, pero tuvo, luego de su gol y hasta los 30´, atisbos de juego colectivo. Le alcanzó para ganar, mantener su valla imbatida por quinta fecha seguida y respirar en la tabla de la mano de un referente como lo es Lucas Sparapani.

DEFENSORES DE BELGRANO: Fue ese triunfo ante Brown el que le había dado algo de tranquilidad para encarar una recuperación futbolística, pero el equipo de Mayor involucionó en su visita a Tres de Febrero, casi nunca se le cayó una idea excepto algunos raptos de Moyano, tuvo varios jugadores por debajo de su nivel y, en el momento en que más necesitaba presionar, no llegó siquiera a tomar conocimiento de cómo atajaba Limousin. Todo esto lo llevó a una derrota lógica que lo golpea y aleja.