Luján
Luján, entre temores y esperanzas
Los lujanenses festejan su aniversario número 78 mientras observan por igual la parte baja de la tabla de promedios y el acceso al reducido por el segundo ascenso en la cuarta categoría del fútbol argentino
Por Nicolás Di Pasqua
El mes de abril de 1936 se ponía en marcha cuando un grupo de jóvenes, reunidos en un baldío ubicado en 25 de mayo y Rivadavia de la ciudad de Luján, decidieron fundar un club para participar de los torneos de la Liga local.
Ricardo Platón fue designado primer presidente de la institución que, inicialmente, llevaría el nombre de River Plate como así también los colores de la prestigiosa institución de la Primera División de nuestro fútbol.
Luego de iniciar sus actividades en la Segunda División de la Liga Lujanense, logró alcanzar la primera categoría del fútbol local para consagrarse campeón en 1942 y 1946.
En 1947, debido a una normativa que impedía la inscripción de un nombre en un idioma distinto al castellano, el club cambio su nombre al actual Club Luján.
El ingreso al fútbol de AFA se dio recién en 1961, tras una larga gestión iniciada en la década anterior, en el torneo de Primera D –Torneo de Aficionados en aquel entonces- y dos años más tarde, Luján conseguía su primer ascenso dentro del fútbol argentino.
En 1963, de la mano de Orlando Garro, Luján ganó la zona B del Torneo de Aficionados y luego se adjudicó el Hexagonal final consagrándose campeón tras derrotar por 5 a 1 Estudiantes de Caseros en el Estadio Municipal de Luján.
Entre la Primera C y la Primera D transcurrieron las siguientes tres décadas del club hasta que en 1991 Luján dio el paso más importante de su historia.
Tras ubicarse en el cuarto lugar en las posiciones de la Primera C en la temporada 1990-91, Luján accedió a un reclasificatorio que pretendía sumar dos equipos más a la estructura de la Primera B.
Por ello, aquellos dos equipos que ocuparon los puestos de descenso en la Primera B y los dos primeros equipos de primera C que no habían conseguido el ascenso, disputaron dos series de ida y vuelta por dos lugares en la temporada siguiente de la Primera B.
Por un lado Deportivo Armenio logró conservar la categoría al superar a Comunicaciones y por el otro, Luján debía enfrentar a Berazategui.
El primer duelo se disputó en Luján con victoria del local por 1 a 0 con tanto de Pedro Nievas. La revancha, disputada el 15 de junio de 1991 en Berazategui confirmó la tendencia del partido de ida y Luján ganó por 3 a 1 con un doblete del mismo Nievas y un gol de Arce que le dieron al lujanense la alegría más importante de su historia.
Dos temporadas en Primera B se convirtieron en el escalón más alto que el club de la basílica pudo alcanzar en su historia.
Tras el descenso de la temporada 1992-93 Luján permanece en Primera C hasta nuestros días en que lucha, un año más, por mantener la categoría que conserva con bastante trabajo en los últimos años aunque, a la vez, realiza una campaña que lo mantiene expectante a la posibilidad de un ingreso al reducido por el segundo ascenso.
Mañana mismo, Luján juega una final por la tabla de abajo ante Ituzaingó como local que puede darle la tranquilidad de complicar bastante a uno de los rivales directos en la lucha por no descender cuando aún tiene por delante un duelo clave ante Liniers fuera de casa en la penúltima fecha del torneo. Y si se da un resultado positivo también puede ilusionarse un poquito mirando la parte alta de la tabla en la que está a sólo cuatro puntos de los puestos de ingreso al Reducido.
Temores y esperanzas se conjugan en el corazón del hincha lujanense que hoy, al apagar la velita número 78, deseará que las segundas superen pronto a los primeros para intentar el regreso tan soñado a aquel escalón visitado a principios de los 90.
Feliz cumpleaños Luján!!!