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Temperley dominaba en su visita a Tucumán pero Lucchetti se lució y salvó a Atlético cuando más lo necesitaba. Rivoira acertó con los cambios y Menéndez y Jara le dieron la victoria. (Foto: Diario La Gaceta)

Por Santiago Ré

LA CLAVE: 
La estupenda labor de Lucchetti, que frustró situaciones clarísimas a Temperley, y el acierto de Héctor Rivoira a la hora de hacer los cambios. 

QUE HICIERON
ATLÉTICO TUCUMÁN: Los eventuales once que venían jugando, con la vuelta del "Pulga" Rodríguez tras su lesión, salieron al campo a darle una alegría a su gente. En el primer tiempo fue una sombra, el rival desplegó su juego y lo tuvo contra las cuerdas hasta el descanso. De esta primera etapa sólo podemos rescatar dos llegadas: una de Menéndez que definió cayéndose y salió elevada, y un tiro con poco ángulo del Pulga que pegó en la parte de afuera de la red. Vale destacar también que Lucchetti "salvó las papas" por lo menos en 3 o 4 ocasiones en las cuales el arquero llevaba todas las de perder frente al atacante. También hubo un gran esfuerzo por parte de Garnier para reproducirse y dar una mano a una defensa que se mostró muy floja.
En el complemento el Chulo le lavó la cara al equipo y con el ingreso de Giménez buscó tener más contención en el medio. Al poco tiempo también ingresó Gómez, un creador de juego, pero lo curioso fue que se retiraron García e Imbert, dos jugadores que venían siendo clave en los últimos partidos pero que esta vez no brillaron. Luego de un intento frustrado donde el Pulga lo dejó solo y Crivelli le ahogó el grito de gol, Menéndez -algo que ya lo caracteriza- se libró de varios marcadores, entro al área y definió cruzado. 1 a 0. 
Diego Jara ingresó para remplazar a Rodriguez y en la primera que tuvo, tras un preciso centro de Grahl, la mandó a guardar de cabeza. Pero eso no iba a ser todo para el goleador, un par de minutos más tarde, el travesaño le decía que no a un tiro de Gómez, pero ahí estaba Jara para pescar el rebote y mandarla a guardar con un cabezazo. Por último resaltar que en el segundo tiempo la defensa levantó mucho su nivel en comparación a la primera parte.
TEMPERLEY: Mantuvo la base para este duelo y salió decidido a faltarle el respeto al dueño de casa. El Gasolero fue una tromba en el primer tiempo y le rompió todos los esquemas y expectativas a su rival. Tuvo varias claras para ponerse en ventaja, primero un remate de Sambueza que salió rozando el palo derecho del arquero, luego un cabezazo de Aguirre que fue muy bien direccionado por el defensor para que el balón se clavara abajo y junto al palo, pero Lucchetti llegó a desviarla y el intento de la visita quedó en nada. El equipo de Rezza dominaba y sin ningún problema elaboró una jugada donde dejó solo a Grbec frente al arquero, pero nuevamente el ex Boca ganó la pulseada. Como si todo esto fuera poco, Oroná sacó de la galera un cañonazo desde la medialuna pero la suerte fue la misma, el balón se desvió en las manos del Laucha y se fue al córner.
Lo peor que pudo pasarle fue que terminara la primera parte. Luego del descanso, Atlético se reordenó y había que volver a empezar. Para colmo los delanteros rivales fueron efectivos y en las primeras tres jugadas claras que tuvieron le anotaron dos goles. Esto desequilibró al Gasolero, y la impotencia por como se habían dado las cosas en el partido lo llevaron a desordenarse y a que terminaran convirtiéndole un tercer gol. Sobre la hora, Enzo Ruiz comprobó que Lucchetti es humano y lo obligó a buscar la pelota del fondo de la red tras un buen cabezazo.
Temperley se atrevió, no vino a buscar el empate, hizo las cosas bien pero no pudo concretar todo lo que generó y se terminó yendo sin nada. A pesar de eso, la actuación de los jugadores fue digna de elogio. No hubo tiempo para más. 

EL PANTALLAZO
En total, 28.000 almas estuvieron presentes en el José Fierro para alentar al Decano. La gente vivió el partido como tal: el líder recibía al escolta. Cuando el equipo de Rivoira la pasaba mal, la hinchada empujaba a los jugadores para que reaccionaran. Hay que reconocer que el público se mostró paciente, en su mayoría, a pesar de que Temperley dominó toda la primera parte y amenazaba con ponerse en ventaja en cualquier momento. Con el primer gol la gente consiguió algo de paz, pero no fue sino hasta el segundo que pudo sentirse tranquila. En ese momento comenzaron los cantos sobre el ascenso y a falta de bengalas (por órdenes de AFA) aparecieron linternas y los flash de los celulares en las tribunas. A pesar de la iluminación, se pudo notar el espectáculo luminoso y finalmente cuando terminó el partido aparecieron los fuegos artificiales, desde atrás de la tribuna Chile. Antes de irse, la gente homenajeó personalmente a Lucchetti por su gran actuación y luego despidieron al equipo bajo el canto de "El Deca va a volver".

ATLÉTICO TUCUMÁN 3: Lucchetti (9)
; Casais (6), Bianchi (6), Malagueño (5) y Sbuttoni (5)A; Imbert (5)A(45´ Giménez 6), Garnier (7), Grahl (6) y Diego García (5)(60´ Gómez 6); Luis Rodríguez (5)(69´ Jara 9) y Menéndez (7). DT: Rivoira. Suplentes: Calviño, Evangelista, Rodríguez Budes y Etevenaux
TÉMPERLEY 1: Crivelli (6); Roselli (6), Bojanich (5), Aguirre (5)A y Romero (6)(83´ Rojas); Sambueza (6)(65´ Ruiz 8), Arregui (6), Oroná (7) y Di Lorenzo (7)A; Dinnero (6)(71´ Luis López) y Grbec (7). DT: Rezza. Suplentes: De Bórtoli, Alonso, Salina y Quiñónes

Jugado el 2 de septiembre
Goles:
74´ Menéndez, 78´ y 88´ Jara y 89´ Ruiz
Cancha: Atlético Tucumán (Muy Buena)
Árbitro: Ignacio Lupani (6)
Público: 28.000
Resultado Moral: Atlético Tucumán 2 - Témperley 2