Envuelto en un momento difícil en lo institucional, Almagro afrontó este certamen con un equipo de bajo costo y que no pudo explotar nunca en rendimiento. Aquel triunfo ante Platense en Vicente López, de modo contundente por 3 a 0, fue desvalorizado rápido, primero porque luego en 15 partidos nunca volvería a ganar Almagro, y luego porque el nivel de Platense a lo largo del semestre nunca fue como para tirar manteca al techo, más bien lo contrario.

   Los conflictos económicos e institucionales se hicieron sentir a pesar del esfuerzo de la dirigencia nueva, y Néstor Rapa decidió dar un paso al costado, empujado por varias dificultades, aunque los resultados no eran buenos. Pero peores lo fueron cuando llegó Mario Finarolli, que heredó un equipo al que nunca pudo darle vuelo, no ganó un partido y tampoco ligó ya que varios puntos se le escaparon sobre la hora.

   Solo 14 puntos en 20 encuentros, pueden terminar siendo un problema en dos o tres años. De la capacidad de Almagro para reinventarse y reordenarse, depende evitarlo. En materia de jugadores, pocos puntos destacables, apenas algunas cosas en el fondo del ex San Lorenzo Abel Luciatti, y la intermitente vigencia de Sparapani. Lo negativo, el escaso gol de los puntas y la floja temporada de Nahuel Basualdo, lejos de la promesa que fue en aquel Almagro finalista de hace 18 meses.

   Y, al igual que Independiente Rivadavia y Lamadrid, no tiene jugadores con más de dos goles marcados.

   A continuación, la nómina de jugadores utilizados por Almagro en este Torneo de Transición. Entre paréntesis, los goles marcados por cada futbolista. En el caso de arqueros, las vallas invictas. Y cada ¨r¨ significa una expulsión.

DT: Néstor Rapa 9 (2-2-5)

Mario Finarolli 11 (0-6-5)