LA CLAVE: Dos. La cantidad de situaciones que falló Almirante estando 1-0 arriba (sobre todo las de Núñez y Colombini), y por el lado de Barracas, el ingreso de Galeano para ganar prácticamente él solo el partido.

BARRACAS CENTRAL: Sin hacer un primer tiempo del todo malo era superado por Almirante. Porque el medio contenía poco y nada y el sector derecho de su defensa era una invitación al ataque. No obstante, le llegaban y respondía, aunque siempre en menor medida. Agustín Gómez lo salvó en varias ocasiones hasta que llegó el 0-1. A partir de ahí reaccionó y tuvo su mejor momento del primer tiempo, donde pudo empatarlo con un tiro libre de Juan Martín que se estrelló en el travesaño. El arranque del complemento fue espantoso: la defensa hizo agua, Almirante le creó cinco situaciones claras de gol y sólo se estuvo en las manos de su arquero. Cuando pasó el vendaval, empezó otro partido. Galeano, recién ingresado, ganó siempre por derecha y cuando afinó la puntería en los centros, empezó a lastimar en serio. Por esa vía llegó el empate y minutos más tarde, un remate cruzado del propio Galeano entrando al área estampó el 2-1. Supo manejar los nervios de Almirante y cuando se lo dispuso lo liquidó -quien sino- Galeano. Tan radical fue el cambio del partido para Barracas que pudo golearlo, fallando -de nuevo Galeano- dos mano a mano clarísimos. Si el Rojo fue el de la última media hora del partido tiene sobrados motivos para ilusionarse con el Reducido.

ALMIRANTE BROWN: Hasta que termine esta historia lamentará  cada día las chances desperdiciadas en este partido. Lo ganaba bien. Porque con mucha gente en ataque y un juego vertical, poco a poco se fue haciendo merecedor del primer gol del partido. García Montero y Diego García se hacían un festín con la defensa local pero no podían desnivelar en el marcador. Sin embargo, pasada la media hora llegó el gol del mencionado García. Con el 1-0 se quedó. Sin embargo, al segundo tiempo salió con una actitud completamente renovada. Volvió a aprovechar el sector derecho de la defensa local para generar peligro pero volvió a chocar contra la buena tarde de Agustín Gómez. El 2-0 parecía al caer, pero Núñez falló un gol increible (en la puerta del área chica, sin marca, elevó el remate por encima del travesaño) y Colombini corrió treinta metros con la pelota para darle la pelota en las manos al "1" de Barracas. A partir de ahí hubo un "click". Su rival reaccionó, le dio vuelta el partido, Almirante entró en la desesperación y terminó entregado a su suerte, incluso pudiendo ser goleado. Se quedó sin DT, San Carlos le descontó un punto y su presente es cada vez más sombrío. 

BARRACAS CENTRAL 3: Agustín Gómez (8); Maximiliano Rodríguez (4), León (5)A, Minici (6) y Fernando González (4)(45´ Bontempo 5); Carlos Arce (6); Mandarino (5)(56´ Galeano 9), Bevacqua (6)A y Sproat (5)(77´ Viegas); Víctor Gómez (6) y Juan Martín (7). DT: Nanía. Suplentes: Piatta, Seccafien, Iván Tapia y Salvatierra

ALMIRANTE BROWN 1: Mattalia (5)A; Machuca (3), Nasif (3)A, Barrionuevo (5) y Blas García Montero (7); Ocampo (5)(74´ Lago), Vega (4)(74´ Canan) y Carruega (5); Diego García (6), Núñez (4)(80´ Molina) y Colombini (5). DT: Pizzo. Suplentes: Holgado, Alonso, Fassione y Serrano

Goles: 34´ Diego García, 63´ Juan Martín, 68´ y 83´ Galeano

Cancha: Barracas Central (buena)

Árbitro: Martín Gonaldi (6)

Público: 424

Resultado moral: Barracas Central 4 - Almirante Brown 3

RENUNCIÓ PIZZO: Tras el partido y luego de que se retiraran los jugadores visitantes, Eduardo Pizzo estuvo reunido unos 15 minutos con dirigentes de Almirante en los escalones de atrás del arco que da a los quinchos. Una vez finalizado el cónclave, el DT se retiró sin hacer declaraciones, mientras que uno de los popes de la Fragata afirmó que Pizzo les había presentado la renuncia y que en las próximas horas la iban a evaluar. Un rato después, fue aceptada por la CD.