LA CLAVE: Fue fundamental que el Azzurro haya golpeado en el amanecer del ST. ya que a partir de allí se le abrió el panorama.

SPORTIVO ITALIANO: Arrancó flojo, pero se fu acomodando con el correr de los minutos con el buen traslado de balón de Godoy y Burzac, aportando situaciones de gol como el tiro libre del primer mencionado o la entrada quemarropa de Peralta abortadas, ambas chances, por el seguro Cáceres. El cabezazo goleador de Marclay en los primeros instantes del ST le permitió manejar las acciones a su antojo, aunque por errores propios, la valla de Zappacosta estuvo a punto de ser vulnerada, de no ser por el travesaño salvador. Sobre el final, en una situación realmente insólita, entre los pilares del equipo no pudieron liquidar el pleito estrellando sus remates en el horizontal opuesto. Desahogo que lo saca un poco del ostracismo en el que estaba metido.

SPORTIVO BARRACAS: Salió a comerse crudo al rival con dos incursiones consecutivas de Salomone y Torres, pero se quedó en el molde cuando el rival le cortó los circuitos de juego. Si bien venía sobrellevando un trámite somnoliento y no era para nada menos, cometió el error de dormirse en una jugada aislada, y pese  a los cambios ofensivos, no consiguió empardar la chapa ni de penal. Ya son siete los encuentros sin ganar del Arrabalero y contadas las horas de Kloker en la conducción técnica.