ALL BOYS: Todo se le simplificó al equipo de Floresta con el tempranero tanto de Maximiliano Salas, quien recibió un pelotazo y a la carrera fusiló a Pellegrino. Luego con la potencia del delantero y la dinámica del uruguayo Soria el dueño de casa generó varias situaciones para ampliar el marcador pero no estuvo acertado en la definición. El trámite giró 180 grados después del claro y tal vez innecesario penal de Porro, que recibió su segunda amonestación, sobre Miracco,  que el propio punta concretó desde los doce pasos. El "blanquinegro" sintió el doble golpe de la igualdad y la inferioridad numérica ya que perdió la posesión del balón y fue superado, aunque no resignó ir a buscar el triunfo frente a una defensa permeable y con dudas. Tal es así que a los 14 minutos todo Floresta pidió penal en una acción en la que tras un corto pase atrás hacia Pellegrino, Salas trabó y ganó ante el guardameta pero se cayó producto del choque cuando enfilaba sólo hacia el gol. Preocupó en alguna otra ocasión el "Albo" pero fue más lo que sufrió con el par de pelotas en el palo de los juninenses y por actuar con 10 jugadores, por lo que a la postre rescató un empate pese a una destacada primera mitad con un marcador que mereció ser más abultado. Y además, gracias a resultados ajenos, los conducidos por Mariano Ferrero siguen fuera de los 6 que descienden. Asimismo el Albo sumó y convirtió como local después de 3 derrotas sucesivas en esa condición.

SARMIENTO: Pobre primera parte del "Kiwi", que distó de presentarse como un equipo que ante el triunfo podía trepar a la cúspide del certamen. Sin protagonismo en la mitad de cancha y consecuentemente nulo de poder de fuego arriba, le entraron por los costados en una última línea que otorgó facilidades en los 90 minutos, coqueteó con el 0-2 en toda la etapa. En el complemento el elenco de Junín dejó una mejor imagen. Comenzó a manejar el esférico, apretó y casi lo da vuelta, pero el poste derecho de Losada se interpuso frente al toque de Miracco en un centro y un violento tiro libre de Lucas Passerini.